Death Road

Death Road

22/06/2016

Es increíble, sino es el curro, son las excursiones, a las 06:15 en pie, a las 06:45 en bus, dos horitas de carretera para llegar a la cima donde empieza un vertiginoso descenso de 63 kms, la famosa Death Road, dicen que es una de las carreteras más peligrosas del mundo y yo, en bici, me mato

Death Road

Después de hora y media, llegamos a la cumbre, el lugar desde donde se inicia el vertiginoso descenso, acompañado de mi team, el guía Fernando, shjhdthjjgh... un tailandés y Álvaro, un chileno de 77 años, desde ya, mi ídolo, todos mis respetos.

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El descenso consiste en 23 kms sobre asfalto por carretera con camiones… y 40 kms sobre ripio, tierra y piedras

Let’s go

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Empiezo el último para tantear la bici, ver cómo voy, etc.… pero a los dos minutos empiezo a coger confianza y noto que voy rapidillo, como el grupo, alucino con Álvaro, el abuelillo, cómo va

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bueno, después de 5 minutos ya me siento mucho mejor y totalmente confiado, empiezo a tomar las curvas como una moto, de hecho, voy como mi cbr, exagerado, empiezan los adelantamientos y llego hasta el guía, le digo que si puedo pasarle que voy más rápido.. y se descojona, cómo? y se pica un poco, lo sé, locura, pero fue la hostia, le ganaba en rectas y en curvas íbamos a la par, lo dicho, voy volando y la verdad que notas esa sensación de cómo me piñe, me mato, creo que nunca bajé a tal velocidad, la leche

un vídeo

Paramos un par de veces en un check point de la poli y a tomar fotos

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el paisaje es la hostia

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como molaaa

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y finalmente llegamos a la verdadera death road, empieza lo bueno

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Ya nos advierte que aquí con mucho más cuidado, es tierra y piedras y con acantilados de 500 metros que cuando vas tan tan cerca de ellos, acojona, no puedes perder la concentración ni un solo segundo pero es imposible no admirar el paisaje donde estamos, muy chulo, empezamos con las nubes y con frío y según vas bajando, más calorcete

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Durante el descenso paramos varias veces a tomar fotos, es increíble el lugar y pensar que por aquí hasta hace nada pasaban camiones y era de doble sentido, flipo

Death Road

Aquí nuestro abuelete ya va con más cuidado, pero aun así, tela, mi ídolo, el guía rapidito de cojones, si alguien iba más lento nos juntábamos cada poco, el tailandés va bien, se le ve cómodo y yo, una bala, no sé si alguna vez había tenido tanto miedo, tanta adrenalina y tanta emoción a la vez, se junta todo, vas a mil pasando por acantilados, el mínimo despiste, adiós, fin para siempre, y se parábamos a hacer las típicas fotos que se ven en las agencias

Death Road

luego paramos en un punto donde se juntan otros grupos para tomar un agua y descansar un poco

Death Road

y seguimos bajando a toda velocidad

Death Road

más fotitos de estas al borde del acantilado que hacen que me tiemble todo, pero todo

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y otras más graciosas

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también hay tiempo para todo

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ufff, es que tela los acantilados, ajonan pero te piden bajar rápido

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otra típica foto

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Bueno, con tanta confianza era normal que fuese jugando con la bici, la movía como quería, caballitos, saltos, era feliz, hasta que… el destino estuvo a mi lado y en contra, a mi lado porque estoy vivo, en contra porque en una de estas, veo una piedra perfecta para dar un saltito y vaya si lo di, tremendo, pero cuando caí, alguien puso una piedra no prevista debajo de la rueda delantera y … buuummmm, una de las mayores hostias de mi vida, no sé lo que pasó, salí volando, literal, menos mal que iba por el centro de la carretera, ni pensar lo que hubiese pasado un poco más al lado, en fin, me levanté como si naja, tipo duro, vino el guía, arreglamos la bici porque la dejé de pena y yo notaba dolor en la muñeca pero me quedaban 20 kms, cómo no voy a terminar

Ahhh por cierto, móvil completamente destrozado la pantalla y móvil doblado por la mitad, qué mala suerte, vaya rachita

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no tengo ganas ni de comer, bueno sí, que tonterías digo

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Y a pesar de todo, seguía disfrutando, saltando, pura adrenalina, no podía dejar de hacerlo

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es que soy feliz

un vídeo

pero los dolores iban a más, la bici no deja de rebotar y las vibraciones me matan pero ya va quedando menos

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y como un campeón que soy, llegué a mi destino por delante de Tailandia y Chile, vamossss, reto conseguido

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experiencia única, inigualable, brutal, la repetiría mil veces.

Comemos en un hotelito construido en medio de la selva, muy mono, con pisci y todo pero el agua está congelada

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nos duchamos, una comida socorrida que ayuda a reponer fuerzas y una cerveza gigante para celebrarlo.

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Ale, regreso a La Paz, 3 horas eternas por carreteras que flipo, qué locura conducir por aquí y que chulo es todo

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pero todo

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y durante el trayecto, veo que el dolor va a mucho más, pero mucho más, de hecho no puedo no estirar ni doblar los dedos, no puedo girar la muñeca, maaalo, así que le digo al guía que cuando lleguemos me diga dónde está el hospital que me voy a acercar a ver si eso…

Dale, 3 horas después nos dejan en agencia, nos dan dvd, me despido de compis y del crack abuelete, pero crack y pillo taxi para ir a hospi y de lo más surrealista que he vivido en mi vida.

Entro en urgencias, hola soy david, español y sin seguro, estooo... me curas? me piden pasaporte y espero… al rato me llaman y me llevan a un box, viene una doctora, me toca la muñeca y al instante dice, es necesario hacer una placa, quieres? ehhh, pues sí, no? se va, viene una enfermera majísima con una factura y me dice, sal fuera, vete a ventanilla y págala, ehhh, sí, tienes que pagar esta factura antes de hacerte la placa, ahhh, flipo, pero no queda otra… pero salgo así, sin más, dejo mis cosas aquí y luego vuelvo, si si, tu tranqui, ok, salgo, voy a ventanilla y pago unos 25 euros, regreso y me llevan a rayos, ok, me hacen radiografía, esperamos resultados y un esguince grave más una fisura en un hueso de no sé qué de la muñeca, no no, si ya sabía yo que este dolor no era normal… entonces, ahora viene doctora.

Viene y me dice que para curarlo, hay que enyesarme, vendarme y tomar analgésicos, que si acepto, yo, alucino, pues claro, viene la enfermera de antes y lástima que no funciona el móvil, para foto, me da la lista de la compra para la farmacia, el yeso, vendas y medicamentos y lo mismo, que vaya a la farmacia, lo compre y vuelva, me meo, de verdad, surrealista, estooo, perdona, dónde hay una farmacia? arriba en el primer piso, ok, pues nada, no cerréis el hospi, que vuelvo ahora... yo alucino

voy a comprar con la mano jodida que sufro del dolor que tengo, subo a la farmacia y joder, otros 60 euros, ale, pa urgencias con la compra, surrealista a más no poder, pero no acaba aquí la cosa, me dice la enfermera que va a calentar agua para el yeso y lo calienta en el termo del té, no puedo, me muero, ayyy viva Bolivia

Al rato vienen dos enfermeras o lo que sean y me escayolan el brazo, literal, vaya tela, no puedo ni ponerme la chaqueta, que si me ayudan me dicen, están viendo lo torpe que soy, dios, ni pensar lo que me espera en las próximas tres semanas…

Pillo bus, llego al hostel y lo prometo, he ido a mear y no he sido capaz de abrocharme el pantalón, me duele tanto y tengo tan pocas fuerzas en el brazo izquierdo que no puedo, no puedo, madre mía, esto va a ser muu duro, de hecho todo esto lo he escrito utilizando la mano derecha, eteeerno, verás para el curro con la de movidas que tengo, en fin, historia surrealista

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