Bunyonyi
14/10/2012las 8, yaaa? no puede ser, ale, desayuno y al coche
nos vamos al lago Bunyonyi y na, tardamos más de 10 horas en llegar, unos caminos… unos baches… paramos en un pueblecito a comer, muu rico, pero no me acuerdo de naa y vuelta a la carretera donde vi una de las peores escenas de mi vida, una escena terrible, acaba de producirse un accidente de un bus, había ya gente por allí recogiendo los cuerpos como marionetas y metiéndolos en coches para llevarlos al hospital, supongo... había niños sangrando por la cabeza, un hombre con la cabeza como… no sé, sin detalles, gente todavía entrando en el bus volcado porque allí quedaba gente atrapada… pero no supe actuar ni ayudar, me bajé del coche y vi que podía hacer, pero me quedé paralizado mirando, sin hacer nada, creo que poco podía hacer pero ni siquiera lo intenté, (como me arrepiento mientras leo esto después de 6 años) sentí impotencia, tristeza y para males, mi coche se va, voy a por él y me dice que por favor me suba, cómo? si la gente está pidiendo que les llevemos al hospi y está diciendo que no! porque luego hay que rellenar muchos informes y explicar a la poli todo lo que hemos visto y yo me pregunto, por qué somos así los humanos? salgo desesperanzado pero continua mi viaje, viaje por el cual pasas por algunos controles de policía que dan miedito, ahí con sus ametralladoras listas para descargar, en fin, hasta vimos a un crio con una escopeta paseando como si nada, amigoooo
bueno, después de todo llegamos a un resort bastante chulo en el lago, overland resort bunyonyi, tiramos mochilas y a cenar, todo riquiiiisimo, una cerve y al fuego un ratito, dios qué momento de placer y relax
ya es de día y se ve el lago rodeado de montañas, todo verde, Uganda entera es verde, un Asturias a lo grande, chulo chulo
bueno, nos vamos a dar una vuelta por el lago en barquita con una guía de allí, negrita, lo digo con todo mi amor, nada de racismo, si ya de canis, cierto día jugando al basket con amigos, la canción del príncipe de belair ese... allí en el poli de villafonta, a los negros, les llamábamos negros, pásala negro, en plan cariñoso, siempre, es más, mi hermano tiene varios amigos negros que cuando les ve, les dice, qué pasa negrata, así que, por si algún señor de color lo lee... que sepa que es con cariño y respeto
muu chulo
que nos va contando cosillas como… y …, solo me acuerdo que el lago tiene 29 islas y ni siquiera estoy seguro,
había islitas con colegios, los nenes allí más ricos… me los como a todos, claro, sino, me comen ellos a mí
también está lleno de bananeros y demás plantaciones, aprovechan toda las laderas de las montañas para cultivar, qué flipe, aquí parece y son pobres, pero no se mueren de hambre, no se ven niños desnutridos, de momento
también se ve algún pájaro chulo, incluso como en los documentales de la tele, el pajarín que sobrevuela el mar y se lanza de cabeza a por su presa, joder, nunca lo había visto, es sacarme de lega y me quedo tonto
bueno, ya de vuelta a tierra, vamos a tomarnos una cerve local muu rica pero no estaba fría, una pena…
qué mona, de guapa me refiero
a una casita donde nos encontramos a un crack de niño, que nos quería llevar a su aldea a ver bailes tradicionales, comida local, beber... pero yo sé que el tío lo que quería era… Noemí…, nos contó que tenía dos novias, típico de estos países, lo dicho, un máquina el tío, una de aquí y otra de España, llamada grece o algo así, y como no,
en fin, nos vamos a comer y dios que cosa más rica, comí un pescao, siiii, con una salsita de lemon, y ya, que nos viene a buscar una canoa para dar una vuelta por el lago pero nosotros solos y madre mía donde vamos, dondeee, ni idea de conducir aquello, ya para salir del embarcadero del hotel dábamos vueltas sobre nosotros mismos, patético, la gente dando ánimos para salir de allí, qué desastre.
una vez cogido algo de ritmo, nos alejamos naaa y empiezan a caer unas gotillas de un cielo negro… decidimos no alejarnos mucho pero aunque hubiésemos querido…imposible, seguíamos girando y girando sin sentido, patético, hasta que vimos unos pajarracos y allí que fuimos averlos, fin de la historia
ayyy dios qué cielo se está poniendo, vámonos y como todavía tardaríamos en llegar un rato, pues corre, remaaa y como no, empezaron a caer nuevamente unas gotillas y decidimos no dejar la canoa en el embarcadero donde le hombre tenía que ir a recogerla, la metimos en el hotel cuando empezó a caer diluvio, y cómo se aparca esto? ni idea, tampoco había una cuerda para atarla ni na, así que, con un poco de fuerza bruta subimos una esquinita a tierra y a refugiarnos del diluvio, monzón, huracán, llámalo como quieras, si nos llega a pillar en medio del lago, morimos, sin más, seguro, increíble la que cayó.
pasada la tormenta, un rico café? claaaro, un african coffe, es parecido a nuestro café con leche pero… no, no es igual, ahí sentado que estuvimos durante 4 horas, charlando y tomando, que a gustito se estaba, hasta que vienen los cagaprisas de los camareros para pedir ya la cena, qué pesaos y además, luego son ellos los que tardan una eternidad en traerte cualquier cosa y te desespera, por lo menos a mí.
después de cenar, también muu rico todo, en serio, viene lo mejor del día y seguramente de mucho tiempo atrás, nos pedimos unas cerves y nos vamos al fuego nuevamente con unos amigos que ya nos habíamos hecho antes, una suiza y un suizo, aunque Noemí dice que es una tía… y una mexica/americana, increíble la tía, una desequilibrada, pero loca de las que hace tiempo que no escucho ni vivo, madre mía.
hablaba mucho, al mismo ritmo que se tomaba ella sola su botellita de vodka, unos gritos, un escándalo, pobres suizos y demás gente que va con ella, la que les ha caído, sobre todo con una canadiense que al parecer la tuvieron cuando fueron a ver los gorilas, esta debía ir como ahora o peor, y la canadiense debió decirla que se callase, normal y al parecer le lió una... me lo imagino, pobre canadiense y ya toda la noche metiéndose con los canadienses.
bueno, no sé cómo y mira que me extraña…
que noooo, que no se ha acabado la noche, a las tantas, empezamos a escuchar un ruido que nunca en mi vida había escuchado, venia de la habitación de al lado o como mucho de la siguiente, alguien gritando muy muy raro, me acojoné porque estoy seguro que estaban apuñalando a alguien, en serio, paralizado en la cama por si entraban en mi habita, al rato vienen los guardias, esos que llevan la metralleta… y empiezan a hablar con alguien y yo solo escuchaba y entendía, “security y police” mal asunto aquello, ya me rayé y estuve casi toda la noche mirando la puerta, y qué hubiera hecho si entra alguien? quita quita, ni pensarlo… y de fondo, la ventana, imagen de miedo cada vez que se oían pasos y pasaba una figura en la sombra de la noche por delante de la ventana, una figura con metralleta… miedo, sí, qué pasa, a ver los valientes, es que hasta estaba tiritando del pánico en la cama y Noemí durmiendo plácidamente… no lo entiendo, finalmente me pudo el sueño, pero después de horas y si entraba alguien, pues que fuese rápido…
nuevo día después de la nochecita de miedo, preguntó Noemí que qué había pasado, pero no supimos nada, sigo pensando que algo muy muy raro pasó en esa habitación, pero como nadie me creerá, pues a desayunar y quien estaba allí para reírse y decir hello? los guiris de ayer que vieron la caída, les miro y se empiezan a descojonar, pues nada, hello y después de desayunar, dejamos el lago, nos vamos a buruguri? ni idea, pero cerca del principal motivo de este viaje, los gorilas!
tranquil@, no te pido ningún dato
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