Día 1

como siempre, salgo cansado y después de trabajar, un viernes, coge tren y metro, qué asco, pero llegas al aeropuerto y eterna espera hasta que sale tu vuelo, por eso,

pues nada, nos metemos al aeropuerto de nuevo y hacemos espera.

Nos montamos en el avión, típicos nervios antes del despegue pero que se pasaron enseguida, a la media hora ya nos estábamos tomando unas copichuelas en el aire, la verdad que sientan tan bien, como siempre, dándolo todo. Llegamos a berlín sobre las 23:00, salimos a la calle y hace mucho frío, así que nos volvemos a meter al aeropuerto y buscar la maldita parada de autobús que nos debe llevar al hostal.

Llegamos, soltamos las mochilas y a la calle, mucho frío, pero salimos igualmente. Vito, que tenía una amiga y digo tenía porque la dejó escapar y no creo que vuelva a verla… estaba por el bario kmoerfnjiuvnb, nos invitó a ir y tomar algo. Taxi y la primera cerveza grande, muu rica, pues nada, no llevábamos una hora y ya estábamos con unos alemanes que nos miraban raros, no es de extrañar…

luego nos fuimos a una disco y pasó lo que tenía que pasar, como la última vez… nos tiraron y eso que vito iba elegante, como siempre, pero no hay manera, y como teníamos hambre, mucha, nos llevaron a un sitio turko de los mil millones que hay por allí y ahí fue cuando vito perdió a su amor, él comiendo un kebab de esos, poniéndose ciego y la tía fuera con sus amigos pasando frío y claro, llegó el momento, entró y nos dijeron, nos largamos, ahí os quedáis con vuestra comida y suerte por alemania. Gracias maja, un placer.

a la aventura y así nos fue, buscamos un sitio, malo, buscamos otro, peor y ya por descarte, entramos en un bar raro raro, pero a lo que íbamos, otra cerve grande, taxi y para casa.
un detallazo del hotel, las tres noches viendo telemadrid ….

día 2:
no hay prisa, no suena el despertador, qué hora es? las 11, bueno, no está mal, pues a desayunar

un paseíto por la alemania nazi, noooo, es broma de mal gusto, con lo que quiero yo a los judíos... de primeras, chula la ciudad, me gusta

no sabía ni que tenía río

ni cosas raras

llegamos a la puerta esa de brandengurgo ya que habíamos leído en las guías que es donde se ponían los guías turísticos que te enseñaban la ciudad y luego tenías que darles la voluntad.

Hicimos un grupo de españoles y nos tocó la pesada, que pelmazo de tía, ufff!! en fin, primera visita, no me acuerdo pero era algo de hitler, todos sentados en círculo y la tía hablando y hablando y yo ya no aguantaba más y les dije a estos que nos veíamos por la noche, ya que eran 5 horas! y yo quería irme a unos recres, era lo que más me apetecía del mundo en ese momento, pero al final, aguanté, no sé cómo, pero me quedé. Volvimos a pasar por la puerta esa y después fuimos al monumento en memoria de los judíos, muu chulo esos bloques de cemento... se supone que tienes que meterte dentro y cada vez son más grandes y tienes que tener la sensación de agobio, de represión, etc…

nosotros estuvimos jugando al escondite… ahí están los muchachos, les veis?

salimos y vimos un trozo del muro con un soldado, era bonito, vamos, hasta ahora lo que más me ha molado, hablo del dibujo, nada más

después fuimos al bunker de hitler para ver donde estaba y por donde huía cuando le persiguieron al final. Ahora es una colonia de edificios y un parking y un círculo hecho con tiza en el suelo para marcar la salida, sorprende, es como si no hubiese pasado nada, todo por encima y ya está.

Luego vimos … no me acuerdo, igual otro trozo de muro y algún edificio grande y chulo y a todo esto, cada vez hacía más y más frío

hasta que llegamos al chek point, punto de encuentro de… no me enteré muy bien, algo de los alemanes y los americanos con un mcdonals como testigo y claro, llegó la hora de comer, un puto sandwich de jamón y queso, para eso voy a berlín? y menos mal que la carta estaba en español, en fin… un café con leche, no tenemos, como que no tenéis? un país megadesarrollado y no tiene un puto café con leche? no entiendo nada, pues ponme un vaso con la mitad de café y la otra mitad de leche, no es tan complicado…
mientras tanto… no aguanto a la guía. Seguimos caminando, ya estoy cansado y no he ido a los recres, vimos .. qué más vimos… no sé, si no me falla la memoria y gracias a esta foto, entramos en un museo de los horrores o algo así, porque me suena ver cosas tremendas, es que no me acuerdo

y ya, vuelta al hotel, una siestecita rica y a cenar. Cogimos un tren para ir a un barrio de esos que ponen en la guía pero como si vas a usera… no hay nada, todo raro, muy raro y como siempre, mil dilemas para encontrar un puto restaurante, después de mil vueltas y ya por desesperación, a un italiano y todo muu rico que nunca falla y por el camino, más cosas raras

Acabamos de cenar y nuevamente los mil problemas para tomar algo, dónde vamos? a este no, a este tampoco, al otro??tampoco, coge taxi, a este? no, coge otro taxi, a este? no…, uffff, y fuimos al templo del tecno a las 03:00, pero claro, petado y una cola kilométrica pa entrar y con el frío que hacía, pa casa …. ahhh no, otro taxi y nos llevó a la otra punta de la ciudad para tomarnos una cerve, por fin en un sitio tranquilo y que nos gustaba, demasiados problemas para tomar una puta cerve… ahora sí, pa casa..

día 3:

lo de siempre, no hay prisa para despertarse y desayunamos muu despacio, alquilamos unas bicis chulas en el hostal, sólo tenían un freno pero molaban… y empezamos a rodar, tranquilamente, por todas las zonas por donde habíamos estado el día anterior, que si lo sé… hubiera ido a los recres y hoy de turisteo, en fin…

me encantan los edificios y cosas sin sentido

jugándonos la vida

el tiegarden es como el retiro, pero más bonito, si es que odio madrid

un vídeo

la puerta, alexanderplatz, avenida karl marx, etc … todo en bici, muy chulo, una ciudad preparada para las bicis, tenían preferencia ante todo y la gente iba con las bicis incluso de fiesta por la noche, con el frío que hacía, ves, ahí ya pues como que no.

mi iglesia

me encantan los edificios

fotaza, no?, ya me animo yo solo...

Comimos en el barrio más antiguo de berlin, donde nació el colega, ya empezaba a ser de noche y eran las 16! y teníamos que ver el east side gallery, una parte del muro de 1 km como recordatorio, apenas lo pude grabar en vídeo porque ya era noche cerrada, pero muy chulo.

un vídeo

Después seguimos con la bici sin saber dónde íbamos pero bien, era nuestro viaje y acabamos en casa. Otra siestecita rica y un último paseo por la bonita ciudad pa ver de noche

las mismas cosas que vemos de día

y de nuevo, aventura para cenar, creo que volvimos a coger tren y metro para ir no sé dónde y cenamos en… tampoco me acuerdo e imagino que tendríamos los mismos problemas de siempre para tomarnos las cerves, pillamos un taxi y nos dejó en una zona se supone que de marcha, pero cuando íbamos a bajar nos dice el taxista: aquí hay muchas ladys, ehh... ladys? free? nooo, y se descojona el menda, bueno, haciendo memoria, al final acabamos en un sótano en el que había gente joven y unas tías jugando al futbolín, según vito, porque yo ni las vi, como casi siempre, atontao, por supuesto no hablamos con nadie, ni entre nosotros, pero eso ya lo tenemos asumido, nos las tomamos y pa casa a ver telemadrid

día 4:

siendo el último día, para que íbamos a madrugar, no? Pues en el puto hostal tenías que hacer el checkout a las 10, el último día, el que más madrugamos y con la mochila todo el día en la espalda porque el avión salía a las 20:00 pero como somos unos desgraciados, se retrasó 2 horas.

Empezamos el día caminando sin saber qué hacer ni dónde ir, ya habíamos visto todo y ya conocíamos berlín mejor que Madrid, fuimos al parlamento con su famosa cúpula? ni idea

brutal, por poner algo

y ya, a la desesperada, acabamos en un museo! Qué mal estaríamos … vito por un lado y carlos y yo por otro, pero esta vez, he de reconococer que moló mucho

ya empezamos haciendo el ridículo para ponernos los cascos de la auto-guía (vente pa Alemania, pepe), nos tuvo que decir el guarda de la puerta como se ponían, en fin, no supimos tampoco ni abrir la puerta del baño y no era mu difícil, sólo había que empujar…

la verdad que el museo era la leche, unas obras de arte…

tenía una escultura egipcia de estas súper famosas, nefertiti? o como se diga, creo… pero estaba muy protegida y con mucha seguridad y no se podía sacar el móvil, una pena, lo intentamos pero casi nos pillan y apenas se ve un dedo, pero ahí estuvimos.

Luego comentamos jugada con vito, que tal su museo y esas cosas que hablan la gente culta y al final, me pasó sus fotos y hay como un trillón de fotos de los museos en la sección de fotos para quien quiera ver más, que me sorprendería que hubiese gente interesada, pero...

ya, hay que salir de aquí y buscar comida, comimos en un restaurante chulo, justo debajo de un puente por el que pasaba el metro y cada vez que pasaba uno, temblaba todo como si se fuese a derrumbar aquello, pero como si nada, a comer! ahhh, nos enamoramos de la camarera los tres pero na…

Una última vueltecita para comprar regalitos para los sobris y vimos un pedazo coche… un buggati de esos, por meter la fotillo

y los pobres, a pillar autobús para el aeropuerto y una vez más, eterna espera. Llegamos a Madrid a la 01:15, corriendo para coger el último metro porque si no, ni me lo imagino y a currar en unas horitas, pero claro, cuando parece que todo ha terminado a las 02:30 de la madrugada un lunes, pues no, llegamos carlos y yo al barrio y en la rotonda de casa, control policial, uno más! no puede ser, con las ganas que tenía en este de que nos hicieran pruebas, van y nos dejan pasar después de preguntarnos, de dónde venís? del aeropuerto digo yo, de viaje dice carlos, no es la misma versión dice la poli, en fin, no es ni será el último control en esa rotonda, hasta la próxima